miércoles, 4 de diciembre de 2013

El secreto de tu patio

Llegamos a tu casa, no había nadie más que tus mascotas, en un principio nos acomodamos y nos servimos algo par comer, mientras veíamos televisión empezó un juego que no podíamos parar, tu tenias algo en mente y salimos al patio, era una tarde de sol y hacia mucho calor, entonces nos mojamos con una manguera entre besos y coqueteos que cada ves se hacían mas notorias y fuertes, después de un rato cortamos el agua y nos vimos los cuerpos traslucidos por el agua, entonces nos sacamos la ropa, mientras yo me sacaba la polera, me sorprendiste y nos fuimos a un lugar con más sombra para amarnos más cómodamente, a la parte techada de tu casa, pues también había una especie de banca que quedaba como si todo se diera para amar, y en tu patio queda plasmado lo que hicimos, ahora cada ves que nos sentamos en esa banca entre risas y cuchicheo nos acordamos de aquel día, en el que si hubiesen llegado tus padres no se que habríamos echo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario